La Dra. Leticia Barrientos y el Dr. León A. Bravo son los académicos de nuestro Doctorado involucrados en este proyecto que contempla también la creación de una plataforma de datos pública, de libre acceso a algunos resultados de conocimiento general.
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Un proyecto cuyo fin es buscar alternativas para combatir la sequía en Chile y el mundo, liderado por la Universidad de Antofagasta, junto a la Universidad de La Frontera y la Universidad de Valparaíso, más una red internacional de investigadores del Instituto Tecnológico de Costa Rica, Universidad de Barcelona y Universidad de Berkeley, fue adjudicado recientemente en el concurso ANID Fondo de Investigación Estratégica en Sequía 2021. Se trata de una iniciativa que contempla estudiar la comunidad de microorganismos presentes en la rizósfera de plantas (zona entre las raíces de plantas y el suelo más cercano), que habitan ambientes secos del desierto de Atacama y de la Antártica, para así en un plazo de 12 meses, rescatar las estrategias moleculares del microbioma de las plantas que viven en ambientes secos y transformarlos en tecnología aplicada para la agricultura en condiciones de sequía. En el proyecto participan tres graduados (Dra. Kattia Núñez, Dr. Olman Gómez y Dr. Andrés Santos) dos académicos de nuestro Doctorado: la Dra. Leticia Barrientos y el Dr. León Bravo. “Basándonos en estudios de microbiología, genómica avanzada y el diseño racional de biología sintética, se establecerán consorcios de microorganismos que entreguen a las plantas moléculas de señalización que les ayuden a sobrevivir períodos de escasez de agua (estrés hídrico)”, explica la Dra. Leticia Barrientos. Estos consorcios microbianos una vez caracterizados serán inoculados en especies cultivadas de importancia económica (trigo y maíz), cuyos rendimientos se encuentran amenazados por la sequía y otros eventos extremos producidos por el cambio climático. “El rol de nuestro laboratorio de investigación, será analizar estas plantas inoculadas en busca de rasgos ecofisiológicos asociados a la mejora de su desempeño bajo este escenario de estrés”, indica el Dr. León A. Bravo. Con el conocimiento que se genera a partir del estudio, los beneficiados serán la comunidad país, debido a que se creará una plataforma de datos pública, de libre acceso a algunos resultados de conocimiento general, el que podrá ser aprovechado por la comunidad científica y, profesionales del área agrícola y medio ambiental. El proyecto, denominado “Consorcios y Microbiomas de Rizósferas en Ambientes Extremos (REMC): una red nacional con un enfoque multiómico para el diseño, construcción y prospección racional de consorcios microbianos de plantas de ambientes extremos para mitigar la megasequía en Chile”, es resultado de las colaboraciones establecidas anteriormente entre los investigadores de ambientes extremos, específicamente en zonas áridas de la Antártica y el desierto de Atacama, bajo la Red NEXER, que fue establecida hace algunos años atrás, por tres universidades del país. Este es uno de las varias iniciativas que surgieron desde la plataforma NEXER, lo que demuestra que la investigación colaborativa multicéntrica en instituciones regionales va más allá de los resultados puntuales de una investigación específica. |